martes, 15 de marzo de 2011

Scaphopodos, Aplacophoros y Monoplacophoros.



Scaphopodos

Constituyen una pequeña clase de unas 350 especies, que son marinas y viven enterradas en el fango o en la arena en aguas bastante profundas. Se hallan en aguas templadas y tropicales. Existen dos familias: Dentaliidae, que incluye ejemplares grandes y comunes y Cadulidae, con ejemplares menores, más cortos y menos tubulares. Los colmillos de mar más antiguos provienen del Ordovícico. Han cambiado muy poco y son poco diversos en forma y modo de vida.

Su concha es tubular, aguzada, curvada y abierta por los dos lados. Se sitúan en la arena con el extremo estrecho sobresaliendo, y por él pasan las corrientes inhalante y exhalante, generalmente a rachas más que a flujo continuo. Del extremo más ancho de la concha, enterrado en la arena, sobresalen la cabeza y el pie; el pie crea un espacio delantero en el cual el animal extiende los tentáculos cefálicos, que recogen y conducen a la boca los detritos, foraminíferos y otros microorganismos de la arena. Los tentáculos son además sensoriales. El alimento puede ser triturado por la rádula, y las conchas de los foraminíferos además son aplastados por las placas de la molleja.

La anatomía de los escafópodos es bastante simple. El tubo está forrado por el manto. No existen branquias; el oxígeno lo toma el manto mismo, que puede poseer unas pocas crestas provisas de células portadoras de diminutos cilios que ayudan a crear la corriente. El oxígeno también puede ser tomado por la piel de otras partes del cuerpo. Los sexos están separados, la fecundación es externa y el huevo eclosiona dando paso a la larva trocófora pelágica.

13 marzo --> Carlos

Aplacóphoros

Desprovistos de concha, son criaturas parecidas a gusanos, que se encuentran en el fango de depósitos marinos, a menudo mar adentro. Este pequeño y mal comprendido grupo se clasificaba antes con los quitones, pero hoy forma un grupo por si mismo. Investigaciónes recientes sugieren que la clase Aplacophora deviera dividirse en dos clases: los solenogastros (solenogastres) y quetodermátidos (caudofoveata).

Los aplacóforos carece de concha externa, aunque pueden poseer numerosas espículas calcáreas punteagudas en la piel, a veces con un aspecto plateado, parecido al pelo de mamíferos. En común con otros moluscos, la mayoría poseen rádula, un manto, una cavidad paleal, un pie y una larva pelágica como la de los moluscos.

La mayoría de las especies son pequeñas, pero el solenogastro Epimenia verruscosa puede medir 30cm. Los solenogastros son bastante móviles y pueden rodear objetos con su cuerpo; el pie se halla reducido a un surco ventral. Los quetodermátidos (así llamados por su piel espinosa) viven en el fango, moviéndose de una forma bastante parecida a las lombrices de tierra, pero pasan gran parte del tiempo en una madriguera. La rádula ha menudo se halla reducida en este grupo.

Monoplacóphoros

Es un pequeño grupo de moluscos primitivos que primero se creyó que se habían extinguido hace unos 400 millones de años. La concha aplanada, con forma de gorro frigio, se parece a la de las lapas, y este grupo solía clasificarse con los gasterópodos.

En 1952 se recogieron ejemplares vivos de monoplacóforos a 3.750 m de profundidad en una fosa del pacífico, frente a Sudamérica, y se describió una nueva especie de monoplacóforo, Neopilina galathea. La concha es pálida, bastante fina, parecida a un gorro frigio y de unos 2'5 cm de longitud. En la superficie interna de la concha, en vez de la única impresión muscular en forma de herradura de las lapas, existen varios pares de impresiones musculares situadios en una serie a cada lado.

La característica más interesante de Neopilina galathea es la repetición de los pares de órganos: existen ocho pares de músculos retractores que ligan al animal a la concha, 5-6 pares de branquias, 6-7 pares de órganos excretores, un sistema nervioso pedio primitivo en escalera de cuerda con 10 travesaños, y dos pares de gónadas. Aunque existe un paralelismo con los quitones, en los monoplacóforos esta repetición va mucho más lejos. Por tanto, se ha sugerido que los moluscos evolucionarion de un antepasado anélido/artrópodo, más que de un platelminto insegmentado, y que la segmentación original del cuerpo se perdió durante las primeras etapas de la evolución de los moluscos. Algunos investigadores no están de acuerdo, considerando que la repetición de los órganos se produjo una época más reciente, siendo más bien un carácter secundario que primitivo.

En Neopilina galathea existe una rádula, una cavidad paleal posterior y un ano, lo que demuestra que la torsión no tuvo lugar en los monoplacóforos. Desde el descubrimiento original se han encontrado más especies de monoplacóforos viviendo en fosas abisales en otras partes del mundo, como en Adén.

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